Consejos para evitar la conjuntivitis

La conjuntivitis es el término que utilizamos para describir la inflamación de la conjuntiva, la membrana delgada y transparente que recubre el interior de los párpados y la parte blanca del ojo (conocida como la esclerótica). Cuando la conjuntiva se irrita o se hincha, los vasos sanguíneos se hacen más grandes y más prominentes, por lo que sus ojos aparecen rojos. 

Se trata, además, de una afección que solemos relacionar con el verano y las piscinas. Sin embargo, existe un cierto riesgo de padecer sus molestos síntomas también en el resto de estaciones del año. ¿Cómo evitarla? Os proponemos esta serie de útiles consejos: 
 
 - No compartir artículos personales de higiene, sobre todo toallas.

 - Cubrirse la nariz y la boca al toser o estornudar y evitar frotarse o tocarse los ojos.
 - Jamás compartir lentes de contacto.

 - Lavarse las manos con frecuencia, especialmente si pasáis parte de vuestro tiempo en lugares públicos.

 - Tener un desinfectante de manos cercano para utilizarlo con frecuencia.

 - Limpiar con frecuencia superficies como los mostradores, tocadores de baño, grifos y teléfonos compartidos con un limpiador antiséptico.

 - Si sufrís de alergias estacionales, consultad a un especialista qué hacer para minimizar los síntomas antes de que comiencen.

 - Si usáis lentes de contacto, aseguraos de seguir las instrucciones de vuestro óptico para el cuidado de lentes y su reemplazo.

 - Para nadar, utilizad siempre gafas de natación para proteger vuestros ojos de las bacterias y otros microorganismos del agua que pueden causar conjuntivitis.

 - Antes de ducharos, quitaos las lentes de contacto para evitar atrapar bacterias entre los ojos y las lentes.